La industria de la televisión se encuentra en estado de shock tras el anuncio de Google TV Streamer, un movimiento que marca un giro inesperado en la estrategia de productos de la tecnológica estadounidense. La noticia ha generado un gran revuelo en el mercado, ya que se trata de un cambio drástico en la forma en que Google se acerca a la televisión. Con este nuevo dispositivo, la empresa busca revolucionar la experiencia del usuario, ofreciendo una forma más accesible y personalizada de disfrutar del contenido en vivo y a la carta. ¿Qué implicaciones tendrá este movimiento en el futuro de la televisión? ¿Cómo afectará a los usuarios y a la competencia? En las próximas líneas, analizaremos los detalles de este anuncio y sus posibles consecuencias.
Google TV Streamer: El giro inesperado que revive la estrategia de productos de la gigante tecnológica
Google es mucho más que un buscador, y la compañía estadounidense tiene actualmente una amplia variedad de servicios y de dispositivos de hardware como sus móviles Pixel, entre muchos otros. No obstante, la compañía liderada por Sundar Pichai también se ha ganado una reputación por la gran cantidad de servicios y de líneas de dispositivos que ha cerrado porque no han funcionado como esperaba y ha preferido centrarse en otros negocios.
¿Recuerdas la red social Google+? ¿Te suenan las gafas Google Glass? ¿El servicio de videojuegos en streaming Stadia? ¿Los móviles Nexus? ¿Las videollamadas de Hangouts y Duo? ¿Los productos para el hogar de Google Home, que pasaron a ser Nest? Y estos son solo algunos ejemplos, si quieres ver más te recomiendo esta web.
El fin del Chromecast
Google llevaba 4 años sin lanzar ningún modelo nuevo de Chromecast, por lo que seguro que muchos temíamos que este dispositivo corriera la misma suerte que otros que pasaron por la tijera de Google. Por suerte no ha sido así. El lanzamiento del Google TV Streamer 4K, la nueva generación de dispositivos de streaming con Google TV para televisores, demuestra que la compañía sigue interesada en la categoría y que no deja de formar parte de su catálogo, al menos en el futuro próximo.
Te cuento las principales razones por las que esto es otro cambio de rumbo más en el historial de Google:
¿La gente de verdad sabe lo que es Google TV?
El cambio de nombre ya de por sí es un bandazo importante, ya que significa la muerte de la marca Chromecast, una de las más longevas de la línea de hardware de la compañía, con 11 años de historia desde el lanzamiento del primer modelo. De momento, el modelo más reciente de Chromecast con Google TV sigue a la venta con un precio de 39,99 euros, mucho más accesible que los 119 euros que cuesta el nuevo Google TV Streamer 4K, pero todo indica que Google seguirá usando la nueva denominación para futuros productos.
Este cambio de denominación no me convence demasiado y creo que se suma a otras decisiones cuestionables por parte de la gran G, como dejar de llamar Google Home a su familia de dispositivos domésticos que ahora se conoce como Nest. Chromecast era una marca con un amplio conocimiento entre los usuarios, al nivel de su gran rival, Fire TV, e incluso por encima en muchos sentidos, así que la decisión de cambiar el nombre a Google TV Streamer puede parecer extraña.
Google TV me parece una plataforma fantástica, ágil y que te ahorra mucho tiempo a la hora de navegar en el televisor, sin necesidad de estar tanto tiempo dentro de las apps, y con recomendaciones de inteligencia artificial y atajos que te ayudan mucho a decidir qué es lo siguiente que te apetece ver. Pese a ello, tengo dudas de que Google TV sea una marca tan conocida como para llamar de la misma forma a uno de los productos más icónicos de Google. El tiempo lo dirá, pero al menos en mi caso, cuando he tenido que explicar a mis conocidos qué dispositivo estaba probando, al final les he tenido que decir que el Google TV Streamer es en realidad un Chromecast. Y ahí sí lo han entendido.
Cambio de formato: ya no es un dongle
No todos los cambios de rumbo son negativos, y creo que el cambio que ha hecho la marca en el diseño del Google TV Streamer es un avance positivo con respecto al de los Chromecast. El dispositivo deja de ser un dongle, es decir, un pequeño producto que se conecta a un puerto y queda oculto por detrás del televisor, como pasaba con los Chromecast, sino que ahora pasa a ganar protagonismo y tiene un diseño independiente pensado para colocarlo junto al televisor.
Es un aspecto que no solo me ha gustado porque combina muy bien con cualquier decoración y es muy discreto y elegante, sino porque además el crecimiento de tamaño permite también más funciones. Por ejemplo, el Google TV Streamer tiene un puerto de Ethernet con el que puedes conectarte a internet por cable para tener una conexión más estable que si usas WiFi. También alberga un pequeño botón en su parte trasera que sirve para que el mando empiece a emitir un sonido de timbre y puedas encontrarlo si lo has perdido, algo que me ha encantado.
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