Nostalgia, mentiras y cintas de video: ¿vuelve a la moda el VHS?
En una época dominada por la tecnología de alta definición y los formatos digitales, un fenómeno retro está ganando fuerza en el mercado: el VHS. Las cintas de video que una vez llenaron los estantes de las videoteCAS y los hogares de todo el mundo parecen estar experimentando un resurgimiento inesperado. ¿Es esto una nostalgia por la época dorada del cine en casa o simplemente una moda pasajera? En este artículo, exploraremos las razones detrás de este regreso al pasado y si el VHS tiene realmente un lugar en la era digital.
La nostalgia revive: ¿regreso a la moda el formato VHS en la era digital?
En los últimos tiempos, algunas compañías como Vice Press, Terror-Vision o, ya en España, Ediciones 79, han decidido lo que parecía impensable hace solamente un puñado de años: lanzar películas en formato VHS. Algo que no se veía desde que el DVD irrumpiera con fuerza en los hogares de la gente y, de manera progresiva, sentenciara a las cintas de vídeo.
Un regreso inesperado
Al principio, puede parecer la idea comercial menos lógica del mundo. Al fin y al cabo, hay muchísimos usuarios que ya ni siquiera tienen un reproductor de vídeo en casa (por no decir que no tienen ningún reproductor, de ningún tipo). Se trata de una sociedad cada vez más digitalizada y menos analógica. Incluso los videojuegos apuntan ya a ese camino, lejos del formato físico.
Sin embargo, si se profundiza en el asunto, es fácil darse cuenta de que la jugada no resulta tan absurda, después de todo. No tiene por qué tratarse de la excentricidad de un grupo de frikis, por así decirlo. El factor nostálgico es un factor poderoso. Mucha gente creció con las cintas de video y, como sucede con tantas cosas, las añora.
La calidad vs. el romanticismo
Es cierto que hoy en día cualquier plataforma de streaming o formato moderno puede ofrecer más calidad de visión, y una mayor comodidad. Pero nada de eso tiene por qué significar mejor. No hay que olvidarse que la practicidad o la propia calidad pueden quedar en un segundo plano cuando se trata de romanticismo o cuando se pretenden rememorar tiempos pasados.