Un joven manipula a su madre pobre para que le compre un iPhone, después de pasar tres días en huelga de hambre
En una sorprendente historia que ha generado indignación en las redes sociales, un joven ha llegado a manipular a su propia madre para que le compre un iPhone, después de someterse a una huelga de hambre durante tres días. Según fuentes cercanas a la familia, el joven había estado presionando a su madre para que le comprara el dispositivo, pero ella se negó debido a la situación económica precaria en la que se encontraban. Sin embargo, el joven decidió tomar medidas drásticas y dejar de comer hasta que su madre cediera a sus demandas. Finalmente, la madre, preocupada por la salud de su hijo, accedió a comprarle el iPhone, lo que ha generado un gran debate en torno a la educación y los valores que se están transmitiendo a las nuevas generaciones.
El impactante vídeo que demuestra la insensibilidad de un joven que hace una huelga de hambre por un iPhone
Un impactante vídeo, con más de tres millones de reproducciones, se ha viralizado en la India. En poco más de un minuto nos habla de la insensibilidad adolescente, el poder de la tecnología, el estatus de Apple y, sobre todo, del amor incondicional de una madre.
Un móvil, como un coche o la ropa de marca, es un símbolo de estatus. Un deseo de aparentar, que funciona. Porque para que alguien pueda sentirse de una clase superior por portar un objeto, requiere que los demás le consideren así, cuando le ven portando ese objeto. Ya sea unas deportivas de cierta marca que valen 400 euros, o un iPhone que supera los 1.000 euros.
El estatus es lo que importa. Alguien va por la calle luciendo un iPhone 15 Pro Max, y mucha gente solo ve lo que cuesta. A lo mejor esa persona va a tener que comer sopas con agua durante tres años, o no puede permitirse ni ir al cine, para poder pagarlo. Pero oye, tiene un iPhone de los caros. Eso es el estatus.
El adolescente obsesionado con el iPhone, y su madre pobre
Lo que menos importa de ese objeto poderoso, son sus funciones. Porque no deja de ser un móvil para llamar y enviar mensajes, o unas zapatillas para pasear o hacer deporte. Lo importante es tenerlos, tocarlos. Y, sobre todo, que los demás vean que lo tienes.
Es una cuestión de mentalidad influenciable, y nadie hay más influenciable, que un adolescente. Hasta el punto de ignorar las penurias de una madre.
Este vídeo fue grabado por el dueño de una tienda de móviles en la India. Decidió entrevistar a un adolescente indio, cuando confesó que había hecho una huelga de hambre de tres días, para que su madre le comprase el móvil:
Sabemos que los jóvenes son capaces de hacer cualquier cosa para comprarse un iPhone. Desde vender a tu propio bebé, a robar una piedra de Pompeya.
Pero este vídeo rompe el corazón cuando conocemos un dato: la madre de este adolescente insensible trabaja vendiendo flores a la entrada de un templo. Es un trabajo básico en un país en donde las clases sociales marcan lo que ganas, así que imaginamos los días, meses, años, que esa madre ya mayor ha tenido que trabajar para ahorrar los más de 1.000 euros que cuesta un iPhone.
Solo hace falta ver el tajo de billetes que lleva el chaval en la mano, y la cara de disgusto, angustia y desesperación de la pobre madre.
La buena mujer alcanza a decir en el vídeo que espero que trabaje y me lo devuelva, mientras el joven recibe su flamante iPhone nuevo. Un deseo desesperado lanzado al viento, que ojalá se convierta en realidad.
Este vídeo nos muestra la otra cara de la moneda, la que nos hace reflexionar sobre lo que realmente importa en la vida. ¿Es realmente necesario sacrificar el bienestar de una madre para tener un objeto que solo nos da estatus?
La respuesta es obvia, pero a veces necesitamos un golpe de realidad para darnos cuenta de lo que realmente importa.
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Etiquetas: Viral, Curiosidades, iPhone
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