La noticia sobre Distintas versiones de Office siguiendo el rumbo trazado por Windows 10 y dejando de recibir soporte para el año 2025 ha generado gran impacto en la comunidad tecnológica. Este anuncio implica que usuarios que utilicen versiones antiguas de Office tendrán que considerar una actualización si desean contar con soporte y actualizaciones de seguridad más allá de la fecha establecida. La decisión de Microsoft de poner fin al soporte de estas versiones representa un paso importante en la estrategia de la compañía por promover el uso de software actualizado y garantizar la protección de los datos de los usuarios. Es crucial que los usuarios estén al tanto de estos cambios para tomar las medidas necesarias y mantener la seguridad de sus sistemas.
Microsoft anuncia el fin del soporte de Office para Windows en Windows, afectando a Office
La vida útil de Windows 10 terminará el 14 de octubre de 2025 y Microsoft se está preparando para algunos cambios. La compañía apuesta por Windows 11 y dejará de ofrecer soporte de seguridad y actualizaciones a algunas apps, otras desaparecerán como WordPad o Windows Mail. Los expertos apuntan a que el fin del soporte de Windows 10 marcará un cambio sin precedentes. La compañía ya está evaluando el impacto que podría tener y prácticamente cada día anuncia nuevos programas que se quedarán atrás. La última víctima será el paquete Office para Windows 10.
Microsoft dejará de ofrecer actualizaciones para las dos versiones de Office el mismo día que abandone la versión antigua del sistema operativo. Las aplicaciones de este paquete han cumplido su vida útil, asegura la compañía, y dejarán de recibir parches de seguridad a partir del 14 de octubre de 2025. La pérdida de soporte en Windows 10 marcará un cambio sin precedentes para la compañía y millones de usuarios con la desaparición progresiva de algunos de sus programas míticos.
Esta estrategia es una de las múltiples de Microsoft para obligar a los usuarios a pasarse a Windows 11. Otra posibilidad que empieza a sonar cada vez más fuerte es que la empresa pretenda potenciar el uso de Microsoft 365, un servicio en línea libre bajo suscripción.
Las alternativas para los usuarios son pasarse a un modelo de suscripción o comprar una licencia de Office 2021, la cual les ofrecería soporte hasta al menos octubre de 2026. Esto no significa que desaparezcan las versiones antiguas de Office, sino que la compañía las dejará morir. Microsoft ha advertido que usar una versión sin soporte supone un peligro de vulnerabilidad.
Los consumidores finales no sufrirán unas consecuencias demasiado grandes debido a la enorme cantidad de apps similares con opciones en la nube o software gratuitos como OpenOffice y LibreOffice. Los aficionados de Microsoft suelen apostar por la experiencia de usuario que les ofrece Office, así que tendrán que pagar Office 2021 o una suscripción a Microsoft 365 para disfrutar de todas las opciones.
Los mayores afectados del fin de la vida útil de Office serán las empresas. Algunas de ellas no cuentan con equipos que soporten versiones más avanzadas de los programas, menos aún aquellos que utilizan inteligencia artificial, tendrán que dar el salto a una versión que les ofrezca soporte a largo plazo (LTSC).
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