Parasyte: los grises ha logrado cautivar a la audiencia de Netflix con su adaptación coreana de un famoso manga japonés. La serie, que se ha convertido en un fenómeno de culto, destaca por su originalidad y atmósfera envolvente. Basada en la obra de Hitoshi Iwaaki, la trama sigue la historia de Shinichi Izumi, un joven que se ve obligado a convivir con un parásito alienígena que habita en su mano derecha. A medida que la relación entre ambos se desarrolla, se desencadenan una serie de eventos que exploran temas profundos como la naturaleza humana y la coexistencia entre especies. Con actuaciones destacadas y una producción impecable, Parasyte: los grises se consolida como una propuesta imperdible para los amantes del cine de ciencia ficción.
Parasyte: Los grises, la serie coreana en Netflix que conquista a la audiencia
Parece que la ciencia ficción está de moda. Tanto en el cine, como en la literatura, y por supuesto en las series de televisión. Así lo han demostrado lanzamientos como El problema de los tres cuerpos, una de las producciones más ambiciosas y caras de Netflix, o Fallout, la adaptación de Prime Video de este videojuego clásico de ordenadores y consolas. Sin embargo, muchos espectadores no se están dejando impresionar por ninguna de las dos, sino por otra propuesta quizá menos ambiciosa, pero que también puede presumir de haber sido un éxito en muchos lugares del mundo.
¿La principal diferencia con sus “competidoras”? Pues que en este caso viene de una inspiración muy distinta: un cómic manga. Parasyte, la nueva serie de éxito “made in Corea”.
La serie en cuestión se llama Parasyte: Los grises, y aunque se estrenó en Netflix sin tanta parafernalia como El problema de los tres cuerpos, lo cierto es que se ha convertido en todo un éxito de audiencia. Primero, ha sido la propia crítica especializada la que se ha mostrado convencida con la producción, alabando lo entretenida que resulta la serie en general.
Por otro lado, Parasyte: Los grises es una de esas series sin demasiados complejos que apuesta por diferentes temáticas y mezcla géneros. Podría decirse que su base nace claramente de la ciencia ficción, pero también tiene pinceladas de terror, algo de drama humano y, por supuesto, monstruos extraterrestres. En definitiva, alicientes para todos los gustos.
Parasyte: Los grises, la exitosa fusión de ciencia ficción y terror en Netflix
Otro aspecto llamativo de la nueva serie de Netflix radica en sus responsables. Como antes comentábamos, está basada (como tantas otras producciones de la plataforma) en un manganime de bastante éxito. Parasyte, cuya serie de animación se estrenó en Japón en 2014, ha logrado vender la friolera de 25 millones de copias en más de 30 países distintos. Su autor es Hitoshi Iwaaki.
Pero aunque tanto el manga como el anime tengan un origen completamente japonés, no sucede lo mismo con la serie de televisión, que sí tiene una factura coreana (como El juego del calamar). De hecho, tras la misma está el director Yeon Sang-ho.
Un equipo con experiencia detrás de las cámaras. En el currículum de Yeon Sang-ho están otras obras recientemente estrenadas como El legado o Rumbo al infierno. Esta última más extraña en su concepto, pero con algunas semejanzas con Parasyte (sobre todo en la amenaza de algo extraño para la sociedad). Sin olvidar tampoco el estreno de Península, la segunda parte de Tren a Busan que, eso sí, no logró reunir las buenas opiniones de la primera.
Mucho mejor respuesta tuvo, eso sí, la aportación animada a la peculiar saga de zombis, Seoul Station, también dirigida por Yeon Sang-ho. En esta ocasión, el coreano ha decidido cambiar muertos vivientes por parásitos, pero el resultado está siendo igual de bueno… o incluso mejor. Siempre siguiendo su particular gusto por las historias que mezclan ciencia, fantasía y muchos elementos sobrenaturales.
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